martes, 4 de noviembre de 2014

Es con la misma vara que vos midas que se utilizará para vos . No se puede saber dónde existe
la verdad, pero la verdad existe y no se puede ocultar, se puede disimular…, por un solo rato…por un solo rato nada más ¿… No es cierto?

La justicia es injusta a veces, es como si lo claro fuere oscuro, si lo bueno fuere malo, y así podés seguir y seguir incansablemente…, ¿verdad?. Mi discernimiento es lo que vale y pesa. Uno se abriga o desabriga según el tiempo, sale con paraguas o sin él conforme ve…, siempre digo que el barrilete se saca si el viento es favorable… ¿No??

Se puede discutir, que es la base del entendimiento, podemos estar bien ubicados, con perspectivas distintas, podemos estar de acuerdo en el desacuerdo. ¿No es cierto?

Insisto en decir, que determino “YO”, si está bién o no, y todos vamos a coincidir, en saber, que la decisión depende exclusivamente de UNO, como tomar una calle en sentido contrario a la mano. Lo que no es mío, no lo tomo, aquello que no me pertenece, no me corresponde adueñarme de lo ajeno. El comprar un campo, no significa ser dueño del mismo, llamo ser dueño a la elaboración personal, al esfuerzo y dedicación personal, a todo aquello que el campo ME DE, no soy el dueño, soy “USUARIO TRANSITORIO”, el que abona momentáneamente los impuestos, decir y mal dicho decir ser el dueño de la nada, todo se volatiliza, todo se esfuma, todo se pierde, o se transforma en otra cosa; ahora no es lo que era, ni lo que será, nunca más. En la vida todo es DEBUT y DESPEDIDA, ES LA TUYA y ES LA MÍA. ¿No te… parece?

Dícese: hace 50 años ¿de quién era…?, dentro de 50 años ¿de quién será…? Tu accionar, tu ESPÍRITU, TU nobleza, tu grandeza, por siempre perdurará en esta tierra, pues la CIMIENTE del AMOR se QUEDA.

El adueñarse de uno, da lugar a una retroalimentación, la suma que en el decir y el hacer hay coincidencia, va fortificando nuestro interior y exterior a la vez, no existe contradicción alguna. Qué importante, ir sumando acción x acción noble, nos enaltece y nos enorgullece, no existe un engreimiento, y sirve de ejemplo, y de muchos imitadores al respecto.
Dícese: ¿Somos como los demás quieren, o serás como las circunstancias te obligan a ser…? Si hay alguien que obligue, hay alguien que mande…, y soy yo el que me mando en mi y el que me obligo…¿no…?

No existe presión, ni obligación de los otros, el buen discernimiento de uno, neutraliza a los demás, la fortaleza personal aparece en la seguridad que se tiene de sí mismo, y la seguridad aparece en el conocimiento, y el conocimiento en el estudio, no se puede HACER sin SER… ¿cierto…? El desconocimiento personal, no nos permite conocer la resistencia, el temple, nuestro carácter, etc.; hay una pretendida y constante idea del conocimiento hacia los demás, cuando no sabemos de nosotros NADA, ABSOLUTAMENTE NADA.

Nuestro deseo es que aquellos nos “DEN” , de nuestra parte el egoísmo nos invade, y se da lo que está demás y molesta. El acostumbramiento y la enseñanza de nuestros mayores, una forma tradicional de hacernos a semejanza, nos “DA y QUITA” a la vez, por eso cuando puedo discernir, puedo saber qué está bien qué no…Para juzgar, para actuar, para aconsejar, para hablar, hay que saber qué decir, para todo se necesita conocimiento, homogeneidad, y Mucho pero Mucho Amor x Amor, es la llave que abre el corazón. El Amor es absolutamente todo, no es importante cuánto tengas, si tenés Amor te pertenece Todo…, Todo…, QUE… TAL…

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